La agencia de calificación Standard & Poor ha bajado la calificación de Sony hasta A- debido a las preocupaciones de esta agencia por las deudas crediticias a largo plazo de la corporación.
"No hay signos de que vaya a detenerse el deterioro de la compañía en sus ganancias en el sector principal de las televisiones de pantalla plana", asegura el informe.
"Además, la carga financiera se va a incrementar al hacer de Sony Ericsson una filial completa", en referencia a la reciente adquisición ejecutada por la compañía japonesa.
"Concluimos que debemos revisar las proyecciones del rendimiento operativo y financiero de Sony y verificar los efectos en la calificación", lo que les lleva a bajarles hasta la puntuación A-.