Brink quiere diferenciarse de todos los shooters típicos que hay en el mercado actualmente, por eso ha planteado una estética más caricaturesca y mucho parkour. Splash Damage también se ha centrado en el aspecto cooperativo, añadiendo varios modos online a su vez.
Para que la competencia no resulte demasiado monótona, lo mejor es contar con diferentes clases para tener diferentes personajes a la hora de enfrentarnos en el modo online o de competir en cooperativo. Atentos a Brink, que viene sin sonar demasiado fuerte y parece que va a ser un gran juego, yo le seguiría la pista.